Gesto caritativo conmueve en redes
Por Benjamín Pacheco, Periodico El Vigia|4 de Agosto
La amabilidad que don Mario Ochoa tuvo con niño de 9 años, a quien invitó a comer en su restaurante, fue reconocida por 'facebookeros” ensenadenses

Para don Mario Arturo Ochoa Pineda, uno de los socios del restaurante Las Cazuelas, resultó sorprendente que un gesto amable con un niño de escasos recursos se volviera una historia viral en redes sociales.

El el domingo pasado, el hombre le regaló una sopa y unos panes a un niño de 9 años, quien llegó al establecimiento alrededor de las 19:00 horas, con un billete de 20 pesos y preguntando si podía comprar algo; al ver esto, don Mario lo invitó a comer.

Un ciudadano identificado como "Dan Vasquez” observó la escena y divulgó la historia en el sitio Ensenadita Puntocom, para reconocer la solidaridad del empresario, en el restaurante con 31 años de existencia.

"El niño volvió a preguntarle al señor si vendían comidas de 20 (pesos), a lo que el señor le contestó que no, que ahí no vendían tacos, ni tortas ni nada por el estilo, pero que le dijera qué quería comer y él se lo invitaba.

"El niño sólo pedía un atún de 10 (pesos), pero el dueño del lugar lo invitó a sentarse y le pidió al mesero que le sirviera de comer. El mesero le dio sopa, guisado y agua. No sé qué le sirvieron sin embargo el niño estaba muy contento y no dejaba de platicar con los meseros agradeciéndoles a todos (...) No sé el nombre del señor, pero sin duda lo que hizo fue un muy bello gesto, y es un gusto saber que existen personas de tan buen corazón. Que Dios le siga multiplicando”, según narró "Dan”.

La historia impactó a tal grado que ayer tenía más de 30 mil "likes” y había sido compartido en Facebook más de 4 mil 700 ocasiones, además de una extensa serie de felicitaciones hacia el empresario.

ACTUÓ DE CORAZÓN

Sobre el alcance de la acción, don Mario comentó ayer a El Vigía que durante todo el día había estado recibiendo felicitaciones y que incluso algunos comentarios lo habían conmovido.

"Es una cuestión que tenemos en Las Cazuelas... darle de comer a alguien si se acerca a pedir un taco. No fue la gran cosa, no lo hicimos con la intención de colgarnos medallitas. Es un gesto que tenemos aquí. Venía solo, era un niño de 9 años. Incluso lo relacioné con mis nietos porque es ‘muy vivo’.

"Incluso comentó con los meseros que le gustaba mucho el restaurante, que cuando fuera grande iba a poner un restaurante como este, pero que algunas cosas las iba a cambiar del menú. Que la sopa le había gustado mucho pero si le ponían brócoli le iba a gustar más”, recordó Ochoa Pineda sobre los comentarios del pequeño.