Apoyan a familia de niño que murió en la “Baja 500”
Por Luis Miguel Ramírez, Periodico El Vigia|11 de Junio
Hasta el momento han recaudado más de 118 mil dólares para ayudar a los padres del menor que perdió la vida tras ser atropellado en el arroyo de Ensenada

Una organización fondeadora ha recaudado más de 118 mil dólares, para apoyar a la familia del niño que perdió la vida tras ser atropellado junto a su madre por un vehículo que competía en la carrera fuera de camino Baja 500.

A través de la página de beneficencia gofundme.com/thehendriks5, creada el pasado 5 de junio, más de 800 personas donaron desde 20 a mil dólares; además, expresaron sus condolencias por la muerte de Xander Hendricks, de 8 años, originario de San Clemente, California.

En la descripción de la página web, indica que los gastos médicos y funerarios fueron cubiertos por una fuente externa, misma que permanecerá en el anonimato; sin embargo, aceptarán el apoyo económico obtenido con las aportaciones.

"Cualquier donación actual o futura ayudará a cubrir próximas necesidades, tales como servicios de apoyo emocional, terapia física, la pérdida de ingresos de Melissa (madre del menor), y simplemente ayudar a la familia Hendriks para recuperarse de esta trágica pérdida”, señala el portal.

Iban a resguardarse

Brandon y Melissa Hendriks, padres del niño fallecido, declararon a un medio de comunicación estadounidense, que momentos antes del fatal accidente, le pidieron a un oficial que les indicara un lugar seguro, porque no se sentían cómodos donde estaban.

En la entrevista difundida por el canal de televisión KTLA 5, ambos padres de familia mencionaron que se dirigían al sitio junto a sus tres hijos, entre ellos Xander, cuando el conductor Todd Pedersen, de Orem, Utah, perdió el control de su vehículo, atropellándolos.

"Recuerdo mirarlo y decir que estaba viniendo hacia nosotros... todos corrimos tan rápido como pudimos, pero no podíamos correr lo suficiente”, dijo Melissa Hendriks, quien presentó un golpe en la cabeza y una herida expuesta en la pierna.

La abuela del menor publicó en una carta, que la familia visitaba a unos misioneros en Ensenada, cuando decidieron llevar a sus hijos a ver la carrera, antes de ir a la playa. Tras accidentarse, el piloto estuvo con el papá del menor, mismo que lo perdonó por tratarse de un accidente.

A pesar de que perdió a su hijo y compañero de surf, no sabía lo que iba a hacer por este horrible dolor y pérdida.

No obstante, el padre del niño supo que el corredor estaba sufriendo demasiado, por lo que también ha pedido a las personas que oren por él.

Cabe agregar que Xander Hendriks era misionero e intérprete en los viajes anuales que realizaba a México. Su papá, Brandon, es un pastor de jóvenes en una iglesia en San Clemente, California, mientras que la madre del menor, Melissa, enseña piano en su casa a niños y adultos.